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¿Una réplica de la XR69 en pleno 2022? Sí. Todavía quedan fanáticos de las motos más clásicas, y Darren Begg, de dB Customs, es un auténtico entusiasta de las motos deportivas de los finales de los 70 y 80. Desde Ottawa, en Canadá, el preparador quiere hacer diez réplicas de la XR69 homologadas para calle, pero personalizando los componentes a su gusto. Aunque su aspecto es auténticamente parecido, la hoja de especificaciones rechina un poco en comparación con la XR69 original. Ahora veremos las particularidades.
La XR69 es una moto originalmente desarrollada entre el famoso Pops Yoshimura y Suzuki. En los circuitos tuvo su apogeo, donde impresionaba con un motor derivado de la GS1000 con 8 válvulas. Sin embargo, esta réplica canadiense tiene un motor mucho más actualizado, también del catálogo de Suzuki: el de la Bandit 1200 de 1997.
El motor incluye modificaciones de lo más interesantes, y que distan mucho de la XR69 original. En el interior lleva unas levas de la GSX-R1100, motor refrigerado por aceite y muelles Kibblewhite, y encendido Dyna 2000, asimismo monta unos carburadores Yoshimura TMR-MJN, filtros k&N y un sistema de escape de titanio de 4-1 de Racelift. Todo ello ajustado con un mapeo del motor del que no conocemos los datos exactos.
En cuanto al diseño, Darren ha optado por un marco tubular de acero al cromo-molibdeno de calidad aeronáutica, suspensiones Öhlins y un jugeo de horquillas derivadas de la BMW S 1000 RR, pero con 10 mm más de longitud y recorrido. En cuanto a las llantas, son ultraligeras, de fibra de carbono de Dymag, y todos los modelos fabricados montarán unas Michelin Pilot Power CT2 de 17 pulgadas. Para frenar, calza unas pinzas Brembo con discos gemelos de 3200 mm y latiguillos Spiegler.
Sin duda que lo más llamativo es el carenado de la réplica. El colín es exactamente del mismo estilo que el de la original XR69, en este caso fabricado con piezas moldeadas en fibra de carbono. Si te fijas bien, los faros no son iguales, ni mucho menos: son los de la Honda VFR400 NC35. En el cuadro de mandos, todo bajo la firma Koso, y acelerador firmado por Yoshimura. Remata el fino asiento de competición.
dB customs sólo tendrá diez clientes, pero eso sí, serán de lo más exclusivos... Por ello, Darren cuenta con varias opciones de decoración del carenado para las motos. Todas las opciones están basadas en modelos clásicos de Suzuki, por ejemplo el tributo rojo y negro de la XR69. Pero el que más ha llamado la atención a los compradores hasta ahora es el original de la XR69, en color azul: "Es difícil negar que parte de la inspiración no vino de la versión del Team Classic Suzuki", dice el canadiense. Y nada de vinilos ni similares. Está todo pintado a mano por el colaborador Sketch's Ink.
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Mientras les lleva bastante tiempo montarlas, la primera réplica de la XR69 está lista, y su primer destino será Nueva Zelanda. Ahora dB Customs ya está centrado en su segundo pedido, "un monstruo asesino de 1216 cc" cuyo próximo destino será California. Te dejamos unas fotos para que te quedes con la boca abierta un rato: